29 de enero de 2018

Seguimos con amistades

Pero estas amistades son de toda la vida. De toda la vida escolar.
Después de 36 años, logramos reunirnos todas las compañeras de colegio. Algunas desde el Jardin de Infantes, otras desde 1er grado, otras desde años de la primaria, y otras durante la secundaria. Pero en resumidas cuentas, personas con las que compartimos los años de la infancia y adolescencia. Compartimos una parte muy importante de nuestras vidas juveniles.

Costó mucho concretar la reunión. Pero hubo una de nosotras que formó un grupo de wasap, y comenzamos a reunirnos virtualmente….para luego ponernos de acuerdo con la fecha de reunión.
No todas vivimos en la misma ciudad, algunas alejadas, más en nuestro país, donde todas las distancias son muchas, los kilómetros son demasiados a veces.
Luego de mucho debatir, por los feriados, por las familias, por vacaciones , etc, etc…..NOS PUSIMOS DE ACUERDO CON LA FECHA!!!!
Ahora venia otra parte, encontrarnos las que vivimos en la ciudad, a armar el cronograma de actividades para la visita. Éramos las anfitrionas, así que todo debía salir lo mejor posible.
“¿Nos reconoceremos?” La pregunta de Teresa realmente fue movilizadora. No físicamente, ya que por redes sociales, la mayoría nos mantenemos en contacto desde hace tiempo. Pero esa pregunta era más profunda. Por lo tanto MUY MOVILIZADORA.
Pero después de reuniones, idas y venidas, logramos la reunión.
Pudimos estar juntas nuevamente las doce…..en realidad éramos trece cuando terminamos la secundaria, una ya no estuvo físicamente con nosotras.
Nos adueñamos de la casa de Marian, antes hacíamos lo mismo con  la de sus padres, donde, durante la secundaria, todas las reuniones eran allí, ahora la suya propia, donde desayunamos, almorzamos, y nos reunimos.


Visitamos el Colegio que nos vio crecer, una de las monjitas nos abrió las puertas y fue como si la infancia y la adolescencia se apoderara de nosotras.


Recorrer sus patios, sus galerías, su capilla, nuestras aulas!! Fue muy, pero muy movilizador!!!
Luego regresamos a la casa, almorzamos, pero en el mientras tanto, miramos fotos, cuadernos con anotaciones, conversamos de a grupos, todas juntas, recordamos, nos reimos, nos emocionamos…..
A la tarde fuimos a Misa en la Capilla del Colegio,  a agradecer a Dios el habernos juntado nuevamente y reencontrarnos con profesoras a las que habiamos invitado. A la noche salimos a cenar, algunas solas otras con sus familias.


 Hermosos momentos!!
Al otro día volvimos a compartir almuerzo, pero antes fuimos a llevar unas flores a la compañera que ya no está físicamente con nosotros….y más tarde tomar mate en un parque de la ciudad y recibir a la que faltaba venir.


Y llegó la hora de despedirnos…..
Esperamos encontrarnos a celebrar los 40 años de egresadas…..
Pero lo que sacamos en conclusión es que estamos iguales, tal vez no físicamente, sino en la esencia….que es lo que realmente importa.
NOS RECONOCIMOS!





4 comentarios:

Tawaki dijo...

¡Qué emocionante! Es bueno descubrir que a pesar del tiempo transcurrido aún os reconocéis, señal de que la esencia de ese colegio sigue viva en vosotras.

Silvia E.Duraczek dijo...

Si, amigo, realmente fue MUY EMOCIONANTE!!Ojalá muchas promociones como la nuestra, puedan sentir lo mismo.

Myriam dijo...

¡Fantástica experiencia! Y además reconocerse después de tantos años.

Besos

Silvia E.Duraczek dijo...

Si Myriam, fue algo muy emocionante, muy movilizador!!Besos!