Pero estas
amistades son de toda la vida. De toda la vida escolar.
Después de
36 años, logramos reunirnos todas las compañeras de colegio. Algunas desde el
Jardin de Infantes, otras desde 1er grado, otras desde años de la primaria, y
otras durante la secundaria. Pero en resumidas cuentas, personas con las que compartimos
los años de la infancia y adolescencia. Compartimos una parte muy importante de
nuestras vidas juveniles.
Costó mucho concretar
la reunión. Pero hubo una de nosotras que formó un grupo de wasap, y comenzamos
a reunirnos virtualmente….para luego ponernos de acuerdo con la fecha de reunión.
No todas
vivimos en la misma ciudad, algunas alejadas, más en nuestro país, donde todas
las distancias son muchas, los kilómetros son demasiados a veces.
Luego de
mucho debatir, por los feriados, por las familias, por vacaciones , etc, etc…..NOS
PUSIMOS DE ACUERDO CON LA FECHA!!!!
Ahora venia
otra parte, encontrarnos las que vivimos en la ciudad, a armar el cronograma de
actividades para la visita. Éramos las anfitrionas, así que todo debía salir lo
mejor posible.
“¿Nos
reconoceremos?” La pregunta de Teresa realmente fue movilizadora. No físicamente,
ya que por redes sociales, la mayoría nos mantenemos en contacto desde hace
tiempo. Pero esa pregunta era más profunda. Por lo tanto MUY MOVILIZADORA.
Pero después
de reuniones, idas y venidas, logramos la reunión.
Pudimos
estar juntas nuevamente las doce…..en realidad éramos trece cuando terminamos
la secundaria, una ya no estuvo físicamente con nosotras.
Nos adueñamos
de la casa de Marian, antes hacíamos lo mismo con la de sus padres, donde, durante la
secundaria, todas las reuniones eran allí, ahora la suya propia, donde desayunamos,
almorzamos, y nos reunimos.
Visitamos el Colegio que nos vio crecer, una de las monjitas nos abrió las puertas y fue como si la infancia y la adolescencia se apoderara de nosotras.
Luego
regresamos a la casa, almorzamos, pero en el mientras tanto, miramos fotos,
cuadernos con anotaciones, conversamos de a grupos, todas juntas, recordamos,
nos reimos, nos emocionamos…..
A la tarde
fuimos a Misa en la Capilla del Colegio, a agradecer a Dios el habernos juntado
nuevamente y reencontrarnos con profesoras a las que habiamos invitado. A la noche salimos a cenar, algunas solas otras con sus familias.
Hermosos momentos!!
Al otro día
volvimos a compartir almuerzo, pero antes fuimos a llevar unas flores a la
compañera que ya no está físicamente con nosotros….y más tarde tomar mate en un
parque de la ciudad y recibir a la que faltaba venir.
Esperamos
encontrarnos a celebrar los 40 años de egresadas…..
Pero lo que
sacamos en conclusión es que estamos iguales, tal vez no físicamente, sino en
la esencia….que es lo que realmente importa.
NOS RECONOCIMOS!
4 comentarios:
¡Qué emocionante! Es bueno descubrir que a pesar del tiempo transcurrido aún os reconocéis, señal de que la esencia de ese colegio sigue viva en vosotras.
Si, amigo, realmente fue MUY EMOCIONANTE!!Ojalá muchas promociones como la nuestra, puedan sentir lo mismo.
¡Fantástica experiencia! Y además reconocerse después de tantos años.
Besos
Si Myriam, fue algo muy emocionante, muy movilizador!!Besos!
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